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¡Bienvenidos al Año del Tigre Negro o Tigre de Agua!

Hoy… nos adentraremos en los misterios del Universo… Pero no solo el Universo posee secretos… la vida, nuestro caminito de cada día, esconde giros inesperados que, para bien o para mal, nos cambiarán la existencia… Por eso muchos se afanan por anticiparse al futuro.

Recuerdo que en mi primer viaje a Corea allá por 2008, cuando todavía no vivía aquí, me llamaron la atención una serie de casetitas – a medio camino entre puestecillos y jaimas- alineadas en fila india, que a los ojos de un profano parecían todas iguales. Como por aquel entonces no sabía leer coreano, pregunté a un amigo que qué eran y me dijo que la gente las visitaba muy a menudo para conocer su futuro. La respuesta me llamó mucho la atención, no solo porque estaban abarrotadas de gente, sino porque me sorprendió que la adivinación estuviera tan expuesta y a plena luz del día como un quiosco de pipas.
[NOTA MENTAL: APARTA TUS PREJUICIOS SIEMPRE QUE PUEDAS]
Pero a lo que iba. Aquello me generó tanta curiosidad que quise entrar, pero pensé que la mediación de un intérprete podría alterar bastante la lectura original y lo dejé pasar. A partir de ahí empecé a fijarme y vi que había infinidad de casetitas similares en cada barrio, aunque en otros casos ya eran tiendas-tiendas, con su iluminación, su decorado, su publicidad en la puerta… Vamos, todo un atractivo reclamo invitando a entrar para conocer tu futuro.

Para los que piensen que exagero con lo de la abundancia de este tipo de establecimientos, basta recordar un dato del semanario The Economist, que ya en el año 2018 situaba en casi 4.000 millones de dólares el negocio de la adivinación en Corea del Sur. Y eso antes de la pandemia, o sea que actualmente debe ser bastante más…
Lo cierto es que pese a haber clara predominancia del budismo y del cristianismo, asentados sobre una fuerte pátina neo confucionista (o confucionismo coreano) que predominó por varios siglos en el país durante el reinado de Joseon, las consultas sobre el futuro están más que normalizadas.

Los métodos que usan son de lo más variado, como el clásico tarot o la quiromancia, aunque además de las cartas y las manos también leen el rostro. También usan un método llamado Saju palja (사주팔자), basado en cálculos sobre el día y la hora de nacimiento en relación a los cuatro pilares de la vida (o los cuatro elementos básicos: agua, tierra, fuego y madera, a los que se añade el metal), pero es algo complejo y os lo contaré más adelante, en otro episodio.
Volviendo a los datos, hace unos años el director de la Asociación de Adivinos Coreanos calculaba que en el país había más de 300.000, y también más de 150.000 chamanes en activo, muchos de los cuales también ofrecen servicios de adivinación.

Y según otros datos de Trend Monitor de 2018, el artículo que leí no explicaba qué métodos siguieron para obtenerlos, un 82% de las chicas solteras y un 57% de los estudiantes o recién licenciados reconoció haber consultado sobre su futuro. Por lo que he podido contrastar, la gente suele ir al menos una vez al año – justo por estas fechas- para conocer qué les deparará la suerte durante todo el año.
A estas alturas os preguntaréis quién va a ver a los adivinos… pues con rima fácil: ¡todo hijo de vecino! Los estudiantes para saber qué carrera elegir, los solteros para ver si hallarán una buena pareja o en qué año o mes les conviene casarse, los recién licenciados para saber si encontrarán empleo, los casados si su pareja tiene problemas, los corazones rotos para saber si su amor volverá, los oficinistas para preguntar sobre el trabajo, los abuelos para velar por sus nietos… Entre los que creen, los que no creen pero van por pasatiempo, los que acompañan a otros y se enganchan, y los que entran por mera curiosidad, dicen que 2/3 de la población ha ido al menos una vez en su vida.

Lo cierto es que la mayoría de estas tiendas no tienen ese halo de misterio ni la parafernalia que se les asocia en Occidente. Muchos de los que ofrecen estos servicios pueden ser gente común y corriente que ha aprendido a leer Saju, las cartas o las líneas de la mano. Pero aún hay más.
En un país tan digitalizado como Corea, no solo hay infinidad de apps – como Handasoft, Jeomsin- para interpretar el futuro que literalmente tienen millones de descargas, sino que hace unos años la empresa Lovot Lab creo un prototipo de robot basado en Inteligencia Artificial, mezcla de obra de arte y concepto experimental, que como un híbrido entre una pirámide y un Buda sentado, ofrecía perlas de sabiduría a los que se paraban enfrente. ¿Serán también los adivinos reemplazados por la inteligencia artificial?

Y después de este recorrido por el mundo de la adivinación en Corea, es hora de dar paso a una invitada muy especial, que además es experta en Saju. Hoy nos acompaña Sonia Cho, productora del Servicio en Español de KBS WORLD Radio, para hablar sobre el Año del Tigre de Agua o Tigre Negro. ¡Bienvenida!

¿Sabían que en realidad el próximo año no empieza el día 1, sino el 4 de febrero, día en que comienza la primavera según el calendario lunar? Se habla de tigre de agua o tigre negro porque, según la filosofía china, cada año trae un elemento yin o yang y 2022 trae “agua yang”, y como el “yang” hace referencia a lo oscuro “tiñe las aguas de negro”, de ahí el nombre Año del Tigre de Agua Yang o Tigre Negro.
En primer lugar, los nacidos en este año bajo el auspicio del tigre negro, presentan gran posibilidad de convertirse en personas de influencia. Entre sus características destacan liderazgo, independencia, franqueza, pasión y desafío, y como posibles defectos una excesiva autoconfianza, decisiones precipitadas y falta de consideración hacia los demás. ¿No les parece que son las características comunes de muchos líderes?^^

Desde la perspectiva de la filosofía china del yin y el yang, 2022 es un año Imyin, o sea, año de un gran árbol o de una montaña sobre el mar: Im representa el agua y Yin, el árbol. Como estación corresponde al invierno, pero anticipa la pronta llegada de la primavera, y por tanto representa el final de una etapa y el comienzo de otra nueva.
Esto parece coincidir con la pandemia del coronavirus, que llegó en 2019 y ha cambiado muchos aspectos de nuestras vidas, acelerando la evolución de nuevas industrias. De hecho, ha obligado a transformar viejas costumbres en ámbitos como educación y marketing. La economía mundial vivirá un sistema pre y pos-pandemia, y creo que 2022 será el año eje para esos cambios. Espero que mi pronóstico sobre el Año del Tigre les haya interesado. ¡Feliz Año Nuevo Lunar y hasta la próxima!
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